El salmo 44 la mejor oración para la mañana
Todas las palabras que forman parte del Salmo 44, que sin importar el idioma tienen una fuerza increíble y única, el mismo va incrementando su poder cuando es recitado por una gran cantidad de personas simultáneamente. Se cree que es tan poderoso porque fue utilizado por hombres importantes con la intención de obtener lo que querían en su época.
Importancia de los salmos
La palabra salmo proviene de un verbo de Grecia que significaba «tocar un instrumento de cuerdas», término que se comenzó a utilizar desde un principio para designar los cánticos, los salmos son muy importantes porque junto al Padrenuestro son el mayor tesoro de oración de la iglesia, con ellos se canta incesantemente la palabra de Dios, por ello el Antiguo Testamento cuenta con 150 salmos.
¿Cuándo debe utilizarse el Salmo 44?
Muchos de los salmos se utilizan en un momento específico del día e incluso a una hora específica, en el caso del uso del Salmo 44 se debe recitar durante la mañana, específicamente antes de que amanezca, ya que en ese momento se puede tener una mejor conexión con Dios y con el Universo.
De tal manera, que lo más recomendable es hacer uso del Salmo 44 los días sábados en la mañana, aunque si se recita durante todo el día existe la posibilidad de que su poder aumente; cuando recitamos el Salmo debemos tener en cuenta que su efecto dependerá de la fuerza espiritual de cada uno, que se considera la luz que debe buscarse.
Es por esta razón, que cuando son realizadas las oraciones, es importante que se acompañen con la luz de algunas velas o con inciensos, esto aumenta considerablemente el poder de las oraciones, además de tu fe.
¿Cómo aprendió Jesus a orar?
Jesus aprendió a orar con su familia y en la sinagoga, pero este superó los límites de la oración tradicional, ya que con su oración mostraba una unión tal con Dios, como solo la puede tener quién es el «Hijo de Dios». Jesus que era hombre y también Dios, se familiarizó como los niños judíos de su tiempo, con las formas de oración y ritos de Israel, su pueblo.
Sin embargo, en Jesus había algo que no venia del aprendizaje, es decir, una unión especial, profunda y única con Dios, el Padre celestial, muchos piensan que se debía a su espera de un mundo nuevo con fe; pero a su vez, era también parte de ese otro mundo, ya que se le termino rezando, se le reconoció como hijo de Dios y obtuvo toda su gracia.
Para Conocer más sobre oraciones https://www.oraciondelamanana.net/
