El dolor se puede describir como una sensación que indica que el cuerpo ha sufrido una lesión o posible lesión, y que es subjetiva de acuerda a la persona que lo está sufriendo es por ello que el dólar varía de persona a persona.

Existen receptores llamados receptores especiales del dolor, que están en todo el cuerpo, el dolor se experimenta en forma de impulsos eléctricos, que se transmiten por todo el sistema nervioso, y que llegan hasta la médula espinal.

Tipos de dolor

El dolor agudo es uno de los dos tipos de dolor que se producen, es de corta duración siendo repentino, donde se producen otras afecciones como aumento de la presión arterial, fuertes sudoraciones y taquicardia.

Por su parte se considera crónico cuando persiste en el tiempo, llegando a durar hasta meses, generado por lesiones graves o enfermedades, este tipo de dolor, aunque es menos intenso que el dolor agudo, y no genera subidas en la presión arterial o no causa sudoraciones, produce disminución del lívido, del apetito, del sueño, estreñimiento, ansiedad y perdida de peso.

Tratamiento

En forma general las dolencias, sin importar la causa que las origine, se trata con analgésicos, que existen en diversas presentaciones, los cuales se pueden ingerir de manera oral, por intravenosa, o por cremas y ungüentos.

Muchos de estos analgésicos contienen morfina, codeína, metadona, oxicodona, levorfanol, entre otros que son usados dependiendo de la zona donde se presente dolor y que cada uno tendrá una manera de aplicación diferente.

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